lunes, 23 de septiembre de 2013

Más que amigos.

   Yo soy de esos que piensan que la vida se compone de momentos, momentos de todo tipo. Hay vidas que se conforman, por desgracia, de más momentos malos que buenos. Afortunadamente, no es ese mi caso. Digo afortunadamente porque hay que tener muchísima suerte para cruzarse con las personas con las que me he cruzado yo. Normalmente, la gente los llama "amigos". Pero es que esa palabreja se queda demasiado corta para lo que intento describir. Y es que no son amigos corrientes, de esos que cuando tienes un problema o estás decaído te sueltan un "No te rayes, tío". De esos hay muchos, tantos que sobran. 

   Yo me refiero al tipo de amistad sin condiciones, de esa que da tal confianza que no es necesario un "¿Puedo ir a tu casa ahora?" sino que con un "Ábreme que estoy en tu puerta, anda" es suficiente. Cada vez que me he encontrado sin fuerzas y abatido, sin ganas de salir a la calle, solo ellos son capaces de sacarme una sonrisa y convertir un día gris en un auténtico arco iris. Solo ellos tienen el superpoder de saber las palabras más adecuadas, los mejores consejos. 

   Quiero daros las gracias por estar ahí siempre y haceros saber que me tenéis a vuestra disposición las 24 horas de los 365 días del año para lo que sea y donde sea. Porque sé que siempre vamos a seguir juntos. Recordad sus nombre porque Antonio, Vicky, Javi, Bárbara, Nacho, Marta, Mamen, Quique, Beli, Andrea y Boris van a hacer cosas muy grandes en la vida y se lo merecen todo. 

    Por todas las risas que nos quedan por sonreír y todas las sonrisas que nos quedan por reír. Por todos las canciones que nos quedan por cantar y todos los bailes que aún están por bailar. Por todas las "peleillas" que tendremos que arreglar. Y sobre todo, todos los momentos que nos quedan por vivir...

De vuestro amigo que os quiere. 

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Faltan Eva y Laura!!!

Anónimo dijo...

forte

Anónimo dijo...

forte

Anónimo dijo...

¡Qué suerte tener amigos como los tuyos!